Pues arrancamos con la sección que os comentaba sobre las mamis instagrameras que me he cruzado en sólo estos 3
meses de vida de mi bolita. Cómo expliqué, cuando estaba embarazada creía que
esas mamis que se daban tanto apoyo, y que decían ser una #familiavirtual era algo exagerado....tres meses
después de dar a luz tengo a grandes apoyos en la red, que me hacen el día a
día de ser mamá mucho más ameno...
En esos días que crees que las ojeras no pueden superarse, que el
dormir se convierte en misión imposible, y que tus brazos se convierten en cuna
andante, siempre hay una mano vecina que te dice, que ella está igual....y
joderrrrr......reconforta...!!!!!!!!!!! Y puede sonar a cabrona, verdad?...jajajajja.....porque
lo estoy releyendo y da la sensación, pero no os quedéis con lo malo de la
explicación...puahhhh😂!!!
Cuando pensé en crear esta sección tuve muy claro, quién sería esa
primera mami que quería proponerle el hacerle una mini entrevista, para
compartir con esos seguidores anónimos(que nunca dejan comentarios...ejem,
ejem!!!).
La verdad que yo instagram, no lo solía utilizar mucho, debo
reconocer, que con tanto trabajo como tenía anteriormente, sólo colgaba fotos
cuando tenía tiempo libre, y eso era ÚNICA Y EXCLUSIVAMENTE en
vacaciones....
Pero al quedarme embarazada, empecé a seguir a mamás, futuras
mamis, tiendas de ropa handmade ideal para los bebés, así como empresas que
organizan fiestas de pijamas infantiles, o simplemente decoración
infantil...normalmente no solía comentar, sólo daba 💜 (likes) a las
fotos.
Pero eso cambió...tropecé con una mami muy especial, que acababa
de dar a luz a su segunda hija, Sira...ella era una gran luchadora, pues
tuvieron que luchar con percentil
bajo durante la gestación, y lo
que no fue gestación....me vi identificada, puesto que desde la semana 26-27
aprox, después de haber pasado esos malos momentos con el ARSA de mi little, me
dicen que mi bolita viene con un percentil 1.....sí, sí, lo habéis escuchado
bien, percentil 1.
Sólo miraba tablas por internet, intentaba buscar a mamás que se
encontraban o se habían encontrado en mi situación para reconfortarme de que
todo había salido bien....pero creedme, nunca
busquéis por internet nada....porque te desanima, lo malo no es que sea
malo, es que es peor, y una mami embarazada, lo último que necesita es leer
tanta desgracia...
Pero bueno, en fin.....entramos en RCIU, y fueron pasando semana a
semana....a veces teníamos percentil 2 incluso a veces 6.....no fue hasta que
cogí la baja del trabajo y pude desconectar y descansar que la bolita empezó a
crecer...no era para tirar cohetes, pero nunca se estancó....
Al hilo del post...que ya me he ido...encontré a Maika, que las
que la sigáis por instagram la conoceréis como @grunfink.
Ella explicaba el bajo peso de su pulgui Sira y me lancé a escribirle un
comentario. En él ponía algo así, como que me alegraba saber que no todo son
penas, como había leído, y que era un consuelo para mí, mami primeriza. Pensé
que no obtendría respuesta, pero me equivoqué. Me envío un sms privado,
interesándose por mí y mi bolita.....a partir de ahí nos fuimos escribiendo, le
iba explicando como evolucionaba mi ratona, y ella me explicaba como iba su
pulgui.
Ella fue la primera mami con la que me escribí y ella tiene la mención especial de esta
sección; lo sé, lo sé, esto no es el "NY TIMES"....pero para mí es
importante, pues este blog es algo así como mi segundo bebé...al que quiero ver
crecer dando mucho, mucho cariño.
Cuando se lo propuse aceptó encantada, como si para ella también
fuese importante, y me hizo sentir muy especial....así que.....quedaros para
conocer a esta mami de 2 preciosas pulguis: Elia y Sira.
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Fotaza cedida por Maika, su marido Carlos, su pulgui 1: Elia y en camino, como podéis apreciar la pulgui 2: Sira. |
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💌Maika y Carlos….cómo fue
vuestro comienzo? Tuvisteis claro que queríais ser papas? Os habéis plantado en
dos?
La verdad es que nuestro comienzo es como muy
peliculero pero me encanta, me encanta sobre todo porque demuestra que el
destino pone a las personas en nuestro camino.
A pesar de haber conocido a Carlos mil años
antes de que nuestras vidas se cruzaran no habíamos tenido mayor contacto que
un hola escueto en alguna que otra entrada o salida de casa de mi amiga Begoña
(sí, Carlos es el hermano de una de mis mejores amigas!) pero al cabo de
los años cuando ella se casó nos reencontramos y ahí fue cuando todo estalló
cual bomba atómica.
Yo fui a esa boda con otra persona que en ese
momento era mi marido pero al día siguiente supe que ese evento marcaba un
antes y un después en mi vida y poco a poco fuimos hablando, siempre
inocentemente, hasta que pasados unos días me di cuenta de que esos
sentimientos no fueron fruto del buen rollo del ambiente, de una fiesta, de una
noche divertida donde todos estábamos más que relajados sino que había algo más
y me lie la manta a la cabeza y rompí con 11 años de relación para empezar de
0, enamorada hasta las trancas y más feliz que una perdiz! Reconozco que no fue
nada fácil, han caído muchas personas por el camino, ha sido duro pero aquí
seguimos, juntos, casados, con dos hijas maravillosas y sobre todo enamorados
como el primer día.
Siempre tuve claro que quería ser mamá, no
cuándo ni si quería serlo joven, de cuántos bebés, etc., pero sí que quería
vivir la experiencia. Cuando conocí a Carlos tenía 31 años recién cumplidos y
quería recuperar mucho tiempo perdido, hacer muchas cosas juntos, viajar, salir,
en definitiva, vivir, con lo que la maternidad quedó un poco aparcada. Ambos
adoramos a los niños y sabíamos que si todo seguía rodando como hasta el
momento llegaría el día pero no nos lo planteábamos como una meta o un
objetivo. En el fondo si te lo planteas siempre hay prioridades sobre la
maternidad/paternidad, un trabajo estable – que por suerte teníamos – una
vivienda, haber hecho o vivido suficiente, etc. Y así, casi sin darnos cuenta
llegó el momento y tal cual nos planteamos ser padres a la primera llegó la
pulgui mayor. Todavía recuerdo como si fuese ayer el momento en que supimos que
venía en camino, el miedo, la euforia, todas esas emociones juntas!!!
Tuve muy claro que me gustaría tener más de
uno, siempre me planteaba 2 y tras un parto tan bueno recuerdo como si fuera
ayer que nada más ponerme a Elia encima le dije a Carlos : “Ya? En serio?
Tenemos otro?” Carlos se tronchaba con las lágrimas de emoción del momento y me
dijo que estaba loca pero es que fue todo tan fácil! Entre esa facilidad y que
la edad apremiaba al cabo de poco decidimos ir a por el hermanito que ha
resultado ser hermanita y que costó muy poco más y vino también en seguida con
lo que se llevan 2 años y 4 meses entre ellas.
Ahora tras la bimaternidad y pasado el
momento melancolía de embarazo y sobre todo tras el sufrimiento del embarazo de
Sira que no ha sido muy agradable podemos decir que sí, nos plantamos en 2, dos
niñas maravillosas que se tendrán la una a la otra para lo que necesiten.
💌Cómo lleva una mamá el percentil
bajo durante el embarazo?
Con Elia ya sufrimos un
poquito por su peso pero es cierto que todo fue muy rodado hasta la semana 32
cuando al hacerme la eco del tercer trimestre vieron que estaba algo justa y
decidieron repetirla en unas 3 o 4 semanas para ver si evolucionaba bien pero
sin preocupaciones. Mi ginecólogo me dijo que sin agobios pero había que
valorar una vez llegado a término si era mejor que engordara fuera si es que no
lo estaba haciendo dentro. En la semana 37 Elia pesaba 2520gr así que
decidieron esperar, sin más. Finalmente nació en la semana 39+5, de manera
espontánea y pesando 2580gr. Fue un peso justo pero digno y así hemos seguido
hasta ahora, es una niña delgada pero que come como una lima y está sana como
una manzana con lo que lo importante es eso, sin duda alguna.
En el embarazo de Sira la
cosa se torció antes, también llevamos el embarazo por privado e íbamos cada
mes a visitar al ginecólogo y rondaba la semana 27 cuando en su consulta me
hizo la eco de rigor y al ver su cara me asusté mucho. El Dr.Landini, un amor
de persona y un profesional como la copa de un pino ,fruncía el ceño y
mencionaba las palabras clave…está un poco pequeño para las semanas de
gestación, a ver, a ver…
Yo ya empecé a temblar,
otra vez el mismo rollo, pensé. Hasta el momento todo era perfecto,
morfológicamente hablando y en todos los demás aspectos peeeero.
Me hizo pasar a la sala
contigua donde me esperaba la Dra. Folch, una profesional de quitarse el
sombrero que acabó siendo casi de mi familia de tanto vernos.
Ella practicaba las
ecografías de alta resolución y doppler y ese silencio mientras exploraba me
mataba tanto! Finalmente en esa eco determinaron una malformación en mi cordón
umbilical que es muy común y que, a pesar de que científicamente no está del
todo demostrado, parece afectar al crecimiento fetal. Mi cordón era arteria
única y eso podía estar afectando a nuestro bebé, estábamos en percentil 16, un
par de semanas por debajo de la edad gestacional y lo único a hacer en estos
casos es intentar hacer reposo para gastar el mínimo de energía posible para
que todo se lo lleve el bebé. Imagínate, trabajando a jornada completa, con
otra niña en casa, pues aunque no hagas grandes esfuerzos físicos el nivel de
estrés es el que es así que de un día para otro a casa, de baja y a verlas
venir. Pasamos a controles quincenales para valorarlo todo y aunque era pronto
parecía estar muy claro que no íbamos a llegar a la fecha probable de parto,
con la ilusión que me hacía a mí que fuera el primer niño o niña de 2017, jeje.
Empezó a coger buen ritmo
y engordaba 200gr semanales, yo me sugestioné mucho y me movía poco, vida semi
normal pero no me atrevía a darme grandes paseos y demás pues cada dos semanas
había que pasar un examen importante, tan importante que la noche anterior ni
pegaba ojo!
Fuimos bajando de
percentil, bajando, bajando hasta que la semana 37+5 y tras pasar a controles
semanales por cautela ese ritmo bajó y engordó 100gr así que orden de desalojo
porque estaba claro que la cosa pintaba como se sabía, al final se estanca y
habíamos bajado a percentil 2. Me entró tal llorera que la pobre Dra.Folch me
animaba como podía, iba lo más optimista del mundo a la consulta esperando que
una semana más superáramos con nota la cosa y sin embargo nos llevamos el
chasco de acabar en una inducción programada. De hecho ya llevábamos las bolsas
en el coche por lo que pudiera pasar porque semana tras semana era superar una
prueba, ya habíamos superado el no tener que aplicar cortisona por si tocaba
madurar los pulmones y la orden de desalojo era previa a la semana 37, ya se
había superado la prematuridad pero mi bebé pesaba 2100gr y teniendo en cuenta
el posible margen de error yo solo podía temblar.
Decidieron ingresarme ese
mismo día y programar la inducción para el día siguiente, cabe decir que las
condiciones eran favorables, como tal estaba dilatada de 3cm y no se descartaba
que de manera espontánea la cosa se desencadenara pero la idea era empezar la
“faena” al día siguiente a las 7 de la mañana justo cuando empieza el turno de
mañana de matronas. Esa noche fue dura, nervios, incertidumbre, dolores, pero
al final mi niña vino al mundo en menos de 3h pesando 2110gr y muy sana, eso
sí, percentil 2, pequeña, pequeña!
💌Cómo se compagina 2
pulguis, con la casa y el trabajo?
Pues sencillamente es una
locura porque se llevan poco entre sí y son edades y épocas muy intensas. El
principio es duro pero tienes a papá en casa que al menos siempre es un apoyo
en todos los sentidos, en mi caso y tras meditarlo mucho decidí no darle el
pecho a Sira con lo que esto ha facilitado mucho las cosas para atender a las
dos sin problema y en igualdad de condiciones. En casa tenemos mucha ayuda pero
aun así es una leonera llena de juguetes que más vale mirar a otro lado y
disfrutar de ello. Las noches son duras, se hacen turnos para que una no
despierte a la otra que duerme como un lirón sin problemas y al menos descansar
a ratos, etc.
La vuelta al trabajo ya es
otro cantar ya que a pesar de alargarlo lo máximo que he podido ya ha tocado
volver a la realidad y es una sensación extraña. Por un lado siempre tuve claro
que no quería ser mama non stop y ocupar mi mente en otras cosas es muy
agradecido y si además añades que me gusta mucho mi trabajo pues es una
maravilla pero por otro lado es un estrés absoluto volver a los horarios y
dejar de ir sin prisa por la mañana. Hasta el momento llevar a Elia a la guarde
era el momento divertido pero una vez hecho eso ya teníamos toda obligación
hecha y Sira y mami eran libres hasta las 17h que volvíamos a buscar a Elia. El
hecho de ir cantando, de subirla a su clase, de ver esos minutos a su
profesora, etc., media vida! Ahora solo podré irla a buscar un día que salgo
antes, por las mañanas por ahora la lleva la abuela o la canguro y es una
sensación muy rara. Elia nota esa ausencia e incluso alguna mañana pregunta
“hoy quién me lleva?” pero es muy buena y se adapta a todo super bien. Nada más
llegar por la tarde a casa empieza el segundo round, ese sí me deja KO de
verdad, es entrar por la puerta y ya casi sin quitarme el bolso estoy amasando
plastilina o recortando Peppas Pig pero bueno, reconozco que salgo pitando para
verlas aunque acabe agotadísima!!! Y que entre plastilina y plastilina Sira me
sonríe y yo me derrito.
💌Cómo llevo Elia, la
princesa de la casa, la llegada de Sira, la otra princesa de la casa?
Elia siempre ha sido una
niña muuuuy buena y cariñosa pero era toda una incógnita saber cómo iba a
recibir a su hermanita/o porque como tal ya iba notando cambios en mami. Al
final detectarme problemas y recomendarme reposo no podía tirar tanto del carro
y justo coincidía con la recta final donde tenía más mamitis y fue algo más
agotador que siempre quisiera a mami pero le hablábamos mucho del “hermanito” e
incluso cuando se aproximaban los reyes magos hicimos una carta para ella y el
hermanito, etc.
Cuando me ingresaron se
quedó con los abuelos unos días pero sí vivimos de manera muy especial el
momento 4 juntos por primera
vez y estuvimos mucho rato a
solas, solo nosotros, la familia que habíamos formado, disfrutando del momento
en que conociera de verdad al hermanito (que resultó ser hermanita) y demás
momentos babosos de amor.
Al llegar a casa fue algo
más complicado pues el estado de Sira no nos permitía salir nada y había que
turnarse para que Elia disfrutara de momentos de ocio. La primera navidad fue
extraña porque no pudimos juntarnos con la familia y la celebramos los 4 ya que
algo más multitudinario era poner en riesgo a Sira de contraer medio moco y con
ese peso tan justísimo se aseguraba un ingreso así que otra navidad sería más
normal.
Elia demostró desde el
principio pura devoción por su hermana pero hay que controlar mucho la fuerza y
jugar con cómo decirle que tenga cuidado con ella por la fragilidad de la
pequeñaja pero se ha adaptado muy bien a pesar de las regresiones típicas de
pedirte que la ayudes a comer, cuando antes era super autónoma, o querer
mimitos extremos o dormir con nosotros pero se lleva bien y lo lleva bien.
💌En ambos embarazos
decidisteis no saber el sexo del bebé hasta el nacimiento, cómo se lleva el ser
un Kinder bueno andante? Llevar un regalo pero no saber que es?…..Cuando nació
Elia, si hubiese sido niño el nombre era Nacho, en el embarazo de Sira,
volvía a ser el posible nombre del bebé?
La idea fue de Carlos, en
el momento que me quedé embaraza dijo que le gustaría no saberlo hasta el final
y aunque en un principio me moría de ganas pensé que por esa vez ganaba él y
guardaríamos el secreto. Cuando lo dijimos a la familia y empezamos a tener que
decir que no queríamos saberlo pues ya era evidente para los médicos empezaron
a tacharnos de locos pero yo solo le he encontrado ventajas, ventajas emocionales
y materiales.
A nivel material había que
limitarse mucho a la hora de comprar ropa porque en el momento que sobrepasabas
la barrera del recién nacido la ropa es o muy de niño o muy de niña con lo que
compré lo básico y muy neutro. De cara a montar la habitación ningún problema
aunque no lo hubiera habido tampoco sabiendo el sexo pues huyo de rosas o
azules e iban a ser blancos u otros colores neutros y de cara al nombre pues
uno de cada ¿Qué problema hay pues? Ninguno! La gente me tachaba de loca pero
fue tan sumamente especial el momento del parto, tanto! Eso sí fue una cita a
ciegas, llamarlo cariñosamente como fuera hasta el final y no pepita o pepito
porque, no nos engañemos, hasta que nace no es pepita ni pepito y
personalizarlo no es para nada necesario. La magia de no saberlo fue
arrolladora y empujé con todas las fuerzas del mundo para por fin saber si iba
a ser Nacho o Elia, es más, mi ginecólogo antes de enseñarme la cara me enseñó
las nalgas porque sabía lo ansiosos que estábamos por saberlo y fue un subidón
de adrenalina puro!
Fue tan especial que
aunque juré y perjuré que en un segundo lo sabríamos con Sira fui yo la que
dije que no quería saberlo una vez más. Y me río yo de lo de la intuición de
madre porque con Elia estaba convencida de que era niño y la cagué de todas,
todas.
Sobre el tema nombre hubo
debate porque como tal mi nombre masculino preferido es Carlos, desde siempre,
pero el concepto llamarse como papá me da repelús con lo que se
descartó de base así que tocaba comerse el coco. Quería un nombre corto y sin
traducciones o como mínimo sin traducciones porque es algo que puede conmigo,
no me gusta nada que traduzcan los nombres a cualquier otra lengua!!! Como
siempre he sido muy de que todo sea muy consensuado y el nombre de niño que me
gustaba a Carlos no empezamos a buscar opciones y ganó Nacho. El caso es que
cuando me quedé embarazada de Sira nos dimos cuenta de que no nos gustaba
tanto, el que sí estaba claro era Sira de niña pues quedó en segunda posición
con Elia, pero en el caso de niño era un volver a empezar…
Estuvimos mucho tiempo
entre Darío y Alonso y al final si hubiera sido niño habría sido Alonso con lo
que nada que ver con Nacho.
Muchas gracias Maika, por aceptar este reto; por habértelo
pedido en el momento justo que volvías al trabajo y no dudaste ni un segundo en
decir Sí. Gracias por abrir las puertas de tu casa, de tu vida matrimonial y de
la “GRAN” familia que habéis formado, porque aunque
sean unas pulguis, tanto Elia como Sira son dos GRANDES.
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Foto cedida por Maika, como veis, no os engañaba...son una GRAN FAMILIA |
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Un millón de besos #familiavirtual!!!!!